NO TENGO BOCA Y DEBO GRITAR - Harlan Ellison
El cuerpo de Gorrister colgaba, flácido, en el ambiente rosado; sin apoyo alguno, suspendido bien alto por encima de nuestras ca...
VENDRAN LLUVIAS SUAVES
En el living, cantaba el reloj con voz: tic-tac, las siete, arriba, ¡las siete! como si temiera que nadie se levantara. Esa ma...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)